Lucía Casaus, arquitecta interiorista fundadora del estudio marbellí, ofrece los mejores consejos en formato claves deco para escoger la decoración adecuada de manera sencilla y con un resultado de lo más sorprendente.
Con el cambio de estación, el sol se convierte en protagonista absoluto también en el hogar. La primavera ha llegado y para darle la bienvenida, nada mejor que vestir cada estancia, exterior e interior de colores, texturas y materiales adecuados que desprendan frescura, naturalidad y alegría. La arquitecta de interiores, Lucía Casaus, socia-fundadora de GC Studio, trabaja, diseña y desarrolla proyectos enfocados a darle un nuevo ambiente a espacios, siempre acordes al gusto y estilo de vida de sus propietarios. Cuando se trata de adecuar la decoración a una nueva tendencia, temporada o estación del año, Lucía apunta que, si no se desea, no es necesario cambiar el interiorismo por completo, sino que “lo más sencillo es cambiar los objetos más especiales. Sabiendo que elegir bien estos pequeños detalles podemos darle una vuelta muy significativa a la casa”, explica.
Claves para refrescar la decoración
¿Si con la entrada de una nueva temporada se hace cambio de armario, por qué no hacer lo mismo en casa? Refrescar la decoración creará un entorno más agradable lleno de luz y color que se transmitirá a su vez a todos aquellos que convivan en estos espacios.
Lucía Casaus propone una serie de sencillas ideas que pueden dar pequeños toques y sutiles cambios de interiorismo capaces de revitalizar el ambiente.
- COJINES: TUS MEJORES ALIADOS. No se trata de cambiar la decoración de la casa en su totalidad, ni disponer de diferentes muebles para sustituirlos por otros, sino de llevar a cabo pequeños gestos cambiando, por ejemplo, la funda de los cojines. Esto aportará una gran transformación de forma sencilla y económica. Los colores oscuros y las telas de lana o terciopelo dejan paso a estampados florares o tonos beige con toques de color en lino o algodón. Esta temporada toman protagonismo los colores mostaza y el azul apagado.
- HOLA, TEJIDOS LIGEROS. Otro cambio que no supone mucho esfuerzo es cambiar los textiles de las habitaciones, siendo un buen momento para darle una nueva personalidad a cada una de ellas. El ascenso de las temperaturas pide guardar los tejidos gruesos por telas más ligeras y livianas que transmitan frescura. Apetecen cortinas en colores claros e incluso cambiarlas por visillos. Toca guardar las alfombras de pelo que tanto resguardaban en invierno y suplirlas por alfombras de fibra o yute. ¿Otra pequeña gran transformación? Elegir ropa de cama colorida o con estampados primaverales.
- TEXTURAS Y ELEMENTOS MÁS NATURALES. Añadir elementos naturales que acerquen los espacios a la naturaleza aportarán frescura y ligereza a la atmósfera. Los espejos de yute pueden darle el perfecto toque estival a la entrada, así como cambiar las lámparas del salón por otras de mimbre en colores neutros. Las cestas de mimbre se convierten en preciosos maceteros y los elegantes muebles de ratán combinan a la perfección con la madera y aportando al instante el ambiente primaveral que buscamos.
- FLORES Y PLANTAS EN CADA RINCÓN. ¿Qué hay más primaveral que las flores y sus agradables aromas? Si la idea es dar la bienvenida en casa, no pueden faltar ya sea como arreglos florales, en jarrones decorando las mesas o macetas de plantas con flor en cada rincón. La vegetación aporta frescura además de purificar y humidificar el ambiente y son la excusa perfecta para convertir el interior de casa en un jardín. ¡La alegría está asegurada!
Imágenes: GC Studio
