Los meses de invierno suelen suponer un aumento en el consumo de energía debido a la calefacción, la cual puede llegar a representar hasta el 50% en el recibo. Comprometer la comodidad y el confort definitivamente no es una opción para LEROY MERLIN que se ha enfocado en ayudar a sus clientes a encontrar el termostato o cronotermostato ideal para mantener el calor del hogar y ahorrar energía a la vez.
Para elegir el artefacto perfecto hay que entender cómo funcionan, qué tipos existen y cuáles son esos consejos de LEROY MERLIN para el uso adecuado de los mismos. Al instalar uno de estos equipos la regulación de la temperatura está en tus manos, ya que podrás elegir el momento en el que quieres que se encienda y apague la calefacción. Sin embargo, cada uno se adapta a necesidades diferentes según tu estilo de vida:
- Termostatos: al pensar en este dispositivo puede que te imagines los analógicos de rueda. En cambio, los termostatos digitales poseen una pantalla ideal para ver la temperatura que hay en casa y así, graduar la temperatura en función de la información que indica el medidor del termostato, dándole prioridad al confort. Este sistema permite que el uso de la calefacción sea más preciso y eficiente ya que solo consumes lo que realmente necesitas.
- Cronotermostatos: por otro lado, si eres un aficionado de la precisión, esta será tu opción. Son aparatos digitales y programables, te permiten controlar la temperatura por horas e incluso días. Además, puedes dejar el equipo programado por varios días en el caso que vayas a pasar un tiempo fuera de casa.
- Termostatos digitales: para los amantes de la tecnología, esta opción es perfecta ya que se controla de forma remota a través de un teléfono fijo o móvil, o a través de una app. Podrás controlar la calefacción de tu hogar desde cualquier lugar y en cualquier momento.
- Emisores térmicos inteligentes: este formato sigue la línea del control y programación de la temperatura de manera remota, a través del móvil. Hay muchos modelos inteligentes, con detectores de presencia, medidores de consumo o, incluso, geolocalización.
Ahora bien, también podrás elegirlos según su conexión ya sea con cable o inalámbrico:
- Con cable: además de conectarse de esta manera, el aparato queda fijado a la pared, ya sea sobrepuesto o encastrado. El dispositivo deberá ir ubicado en un lugar alejado dentro de tu hogar, en donde haya fuentes directas de calor como chimeneas, hornos, radiadores próximos, etc.
- Inalámbrico: trabaja conectado al sistema de calefacción por radiofrecuencia. La ventaja de estos modelos es su movilidad y que pueden ser utilizados en viviendas que no disponen de la instalación eléctrica adecuada, solo tendrás que escoger el modelo que posea el alcance necesario para tu casa.
Conociendo todo esto, ahora el punto principal que debes tener claro antes de comprar un dispositivo son sus funciones, independientemente de sus características individuales, estos son sistemas de control que abren y cierran un circuito eléctrico en función de la temperatura, conectados a la caldera y son los encargados de activar o desactivar el sistema de calefacción.
Por otro lado, el circuito de calefacción con radiadores conectados a una caldera tiene un funcionamiento sencillo: el agua se calienta en la caldera y mediante un recorrido de tuberías llega a los radiadores de la casa. Al enfriarse, el agua retorna a la caldera y así siempre se utiliza la misma cantidad de agua para la calefacción. Entonces, lo que hacen los termostatos y cronotermostatos es activar y desactivar la llama que calienta el agua del calderín.
Ahora, si te estás preguntado por qué deberías invertir en un termostato inteligente podemos resumir la respuesta en las funciones especiales que los dispositivos poseen que ayudan a dar un funcionamiento más personalizado y, por ende, un uso eficiente de la calefacción. Algunas de esas funciones especiales son:
- Medidor de consumo: para saber el momento del gasto energético por horas, días, meses y años.
- Geolocalización: permitirá que el sistema sepa que cuando estas cerca de casa y, en función de la distancia previamente programada, encenderá el sistema. Del mismo modo, al alejarte de casa se apagará.
- Pantalla retroiluminada: posee una fuente de luz tras el panel que ilumina la imagen que se ve en el panel.
- Detección de presencia: cuando el termostato detecta presencia en la estancia, el sistema se activa automáticamente; si no hay nadie, la calefacción se apaga o pasa a modo económico.
- Controlable con la voz: se puede manejar a través de las órdenes dadas por la voz.
Para LEROY MERLIN, los consejos más importantes para el uso adecuado de los termostatos empiezan por tomar en cuenta la temperatura de inercia, que son los grados mínimos que puede haber en tu casa y, que dependerán de los materiales, ubicación, aislamiento e incluso piso del que trate.
Por otro lado, la temperatura de confort es aquella en la que te sientes a gusto en tu hogar. La diferencia entre esta y la temperatura de inercia, es la temperatura intermedia (la más importante a la hora de prever como ahorrar energía en casa). Hay que procurar que la diferencia entre la temperatura de confort y la intermedia no sea mayor a cinco grados.
Una vez decidas cual es el dispositivo perfecto para ti, recuerda que la instalación de estos equipos es muy sencilla y solo necesitaras herramientas básicas como destornilladores de precisión, un taladro normal, una broca y un alicate especial para trabajos de electricidad. Al tener todo esto, no tendrás ningún inconveniente para llevar a cabo la tarea y así, podrás disfrutar del verdadero calor de hogar sin comprometer el consumo de electricidad.