Un proyecto de arquitectura pionero ha construido una casa para desafiar a la naturaleza y la ha ubicado en el desierto de Gorafe, en la provincia de Granada, donde permanecerá durante un año para demostrar las prestaciones del vidrio sostenible.
La iniciativa de la firma Guardian Glass ha «plantado» en el desierto de Gorafe una vivienda de 20 metros cuadrados para demostrar, durante un año, que el uso de vidrio sostenible la hace habitable durante las cuatro estaciones del año pese a estar ubicada en un entorno extremo.
La vivienda se levanta sobre una estructura de madera y está completamente acristalada con los vidrios eficientes de la empresa que impulsa la iniciativa y cuenta con un sistema de filtrado de agua, otro de producción de energía y un conjunto de paneles solares fotovoltaicos.
Un equipo de arquitectos liderado por Spela Videcnik, de Ofis Arquitectura, ha materializado esta vivienda que pretende responder a los desafío del medio ambiente y ser eficiente desde el punto de vista energético al personalizar el tipo de vidrio para que se adapte a las condiciones de cada entorno.
El desierto de los Coloraos de Gorafe, en la comarca de Guadix, está caracterizado por formaciones conocidas como «badlands» y se define por su extrema aridez y los cañones, cárcavas, barrancos, canales y otras formas geológicas consideradas adversas.
«Nos entusiasma cómo puedes crear una vivienda con un ambiente confortable en unas condiciones duras como las del desierto», ha detallado la arquitecta de esta casa del desierto, que estará habitada en intervalos durante un año para comprobar su habitabilidad.
«Puede parecer una locura porque se trata de hacer algo similar a un invernadero en un desierto dónde, además, las viviendas tradicionales son las casas cueva, que se excavan en el terreno como forma tradicional para adaptarse a este clima tan extremo», ha explicado el alcalde de Gorafe, Miguel Pérez Navarro, que ha reconocido su sorpresa ante un proyecto que ya es real.
Fuente: Agencia EFE